jueves, 23 de febrero de 2012

GRAN MARCHA NACIONAL DEL AGUA 2012

GRAN MARCHA NACIONAL DEL AGUA 2012
La Gran Marcha Nacional del Agua 2012 se inició el 01 de febrero con una caminata de diez días que partió desde Cajamarca hacia Lima a donde llegó el 09 de febrero con cerca de 1200 personas. Luego, el viernes 10 de febrero los manifestantes provenientes del norte del país se unieron a miles de limeños pertenecientes a colectivos ciudadanos, movimientos y partidos de izquierda y progresistas. De igual manera, se unieron diversas organizaciones campesinas de Cusco, Tacna, Puno y Moquegua que sufren problemas de abastecimiento y contaminación de agua. En total, la caminata abarcó cerca de 30 cuadras y se calcula que la protesta congregó a cerca de 20 mil personas. El recorrido estuvo lleno de música, color y alegría con manifestaciones culturales que pretendían crear conciencia en la ciudadanía acerca de la importancia del agua y de los graves peligros de la minería a cielo abierto.


La Marcha del Agua culminó en la Plaza San Martín con cerca de 20 mil manifestantes que abarrotaron la plaza de tal manera que las cuadras aledañas también fueron ocupadas por ciudadanos que luchan por que se respete al medio ambiente.
La Marcha del Agua es un evento de carácter regional en Latinoamérica y se desarrolla dentro de un contexto mundial relacionado a los conflictos que genera el modelo de desarrollo basado en la explotación indiscriminada de recursos naturales. Por otro lado, aquellos que pedían que esta protesta no sea solo “política”, sino también “técnica”, pueden estar tranquilos porque estuvo acompañada por una Misión Internacional de Observación de la Marcha por el Derecho al Agua en el Perú conformada por especialistas de primer nivel entre los cuales se encontraban Pedro Arrojo Agudo[1] y David Barkin[2]. Estos especialistas han manifestado que se encuentran elaborando una evaluación al Proyecto Conga en Cajamarca.


[1] Profesor emérito del Departamento de Análisis Económico – Universidad de Zaragoza (España). Ganador del Premio Goldman en Medio Ambiente, premio que rinde homenaje a los héroes populares que trabajan para proteger y mejorar el ambiente natural de nuestro planeta poniendo en riesgo, muchas veces, sus vidas debido al enfrentamiento constante que tienen que hacer al modelo de desarrollo impuesto por las grandes corporaciones que pretenden seguir contaminando para ganar más dinero fácil.
[2] Doctor en Filosofía con especialidad en Economía por la Yale University.

La minería a tajo abierto en el Proyecto Conga


Minería a tajo abierto, cabeceras de cuenca, mercurio y cianuro
En primer lugar, la minería a cielo abierto o “a tajo abierto” es aquel tipo de explotación minera en la cual  se derrumban montañas. En un solo día, se utilizan 9 toneladas de explosivos. Por ejemplo, para obtener 1 solo anillo de oro, se tendrían que dejar 18 toneladas de desechos tóxicos. En segundo lugar, una cabecera de cuenca es el origen, no de un río, sino de un sistema de ríos y lagunas, de todo un sistema hídrico; en consecuencia, se trata de todo un conjunto de  ecosistemas que son irremplazables, por lo cual su destrucción implicaría un desastre ecológico. En tercer lugar, el cianuro es una sustancia venenosa, potencialmente tóxica y letal que contamina el medio ambiente y pone en peligro la salud de los seres humanos. De igual manera, el mercurio es un metal muy pesado, tóxico que, en estado líquido, resulta muy peligroso para la salud, ya que afecta al sistema nervioso, provoca daños permanentes en cerebro, corazón, riñones, así como pérdida de la memoria y ceguera.


EL PROYECTO CONGA
En el caso de la minera Yanacocha en Cajamarca, el Proyecto Conga implica la explotación de 2 lagunas debajo de las cuales se encuentra cobre, oro y plata. Las lagunas El Perol y Mala serían secadas, y otras dos lagunas, Azul y Chica, servirían de depósitos para los desechos tóxicos producto de la actividad minera. Con ello, la ejecución del proyecto comprendería la destrucción de 4 lagunas. Además, debemos considerar que esas lagunas son cabeceras de cuenca; es decir, esas lagunas se encuentran en la parte más alta de la cordillera y son las fuentes de un conjunto de ríos que abastecen de agua a las poblaciones que viven en las zonas más bajas. En consecuencia, se trata de un conjunto de ecosistemas, con lo cual la ejecución del proyecto minero estaría afectando a las personas que necesitan del abastecimiento de agua para el consumo humano y para la agricultura, así como se estarían matando a flora y fauna presentes en la zona. Esta es una de las razones por las que el pueblo de Cajamarca se ha movilizado desde fines del año pasado en contra  del Proyecto Conga de Yanacocha. Por ello, se convocó a una marcha que partió el 01 de febrero desde Cajamarca y que tuvo programada su llegada a Lima el pasado 9 de febrero. Por ello: “¡CONGA NO VA!”.

Esta es la laguna El Perol. Al igual que la laguna Mala, debajo de ella se encuentra el tan preciado oro que las mineras pretenden explotar. El proyecto Conga pretende secar estas lagunas y utilizar otras dos, lagunas Chica y Azul, como depósitos de desechos tóxicos, además, se destruirían las montañas aledañas, ya que esa es la forma más barata, fácil y rápida de obtener el oro. ¿Debe seguir este tipo de minería funcionando en el país?